Por las páginas de este libro y de la mano de su autor, se inicia un recorrido de fe y devoción a la Imagen del Santo Cristo de La Sangre que nace en el siglo xv y llega hasta nuestros días de manera muy intensa. Es evidencia de esta devoción el peregrinaje constante en los alrededores del Hospital General de fieles que veneran la Imagen y le llevan cirios, en señal de ruego o agradecimiento, gente de todas las edades que se recoge en la Capilla de la Anunciación para orar y honrar a Dios a través de una Imagen que desde sus orígenes ha estado vinculada a la historia de Mallorca y a la procesión del Jueves Santo.
Es por ello que, como indica el autor, «en tiempos de crisis de fe, de crisis de vocaciones y hasta de crisis de espiritualidad y de religiosidad, el Santo Cristo de la Sangre es un ejemplo de que la llama sigue encendida o, dicho en términos bíblicos, que la zarza permanece ardiente». Traspasemos, pues, el umbral del Hospital General, crucemos su patio y abramos la puerta de su Iglesia para sumergirnos en la fe y entrar en la historia de esta devoción.